Margarida tiene una presencia serena. Escucha con atención, habla con cuidado y siempre está dispuesta a ayudar — sin prisas, pero con total presencia.
Le gusta crear con las manos, con tiempo y con alma.
Le encanta leer 📚, jugar al pádel 🎾 y embarcarse en proyectos de bricolaje — pequeñas creaciones que la hacen sentir como en casa.
Se emociona con la belleza de las cosas sencillas y encuentra propósito en conectar con los demás.
En BRAVA, tiene claro su papel: estar disponible, contribuir con equilibrio y hacer que el proceso sea más ligero para quienes llegan.
Margarida no fuerza — se acerca con calma y crea vínculos genuinos con quienes la rodean.
Y eso es lo que la define: la forma sincera en que cuida, acompaña y convierte cada relación en un gesto de amistad. 🤍